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El calor del Cactus

Una de las plantas que más llama la atención a nivel mundial por ser estéticamente diferente es el Cactus, el cual es oriundo de América, aunque existen especies provenientes de África. Esta planta es resistente a altas temperaturas pertenecen a la familia de las suculentas denominadas Cactaceae.

Los Cactus son jóvenes en relación al tiempo de vida de nuestro planeta, apareciendo desde hace aproximadamente 40 millones de años, y han ido evolucionando hasta existir hoy más de 2.500 especies. Sus características esenciales son los tallos gruesos y carnosos y la presencia de espinas, aunque, como ya veremos más adelantes, existen tipos de cactus que no poseen estas cualidades.

Las espinas son el lugar en donde los Cactus retienen el agua durante largos períodos de tiempo, por lo cual son resistentes a ambientes áridos. La cantidad de espinas determina la cantidad de agua que son capaces de acumular. Estas plantas se reproducen por semillas que son esparcidas luego de que el fruto se desarrolla.

Se piensa que las primeras especies de Cactus tuvieron hojas, y estaban en climas húmedos selváticos. Sin embargo, los cambios climáticos hicieron que esas hojas se convirtieran en espinas y pudieran así adaptarse al cambio. Esta información se obtiene por el estudio de la especie más antigua, la Pereskia. 

En lo que refiere a su expansión se piensa que, cuando los continentes se separaron, las diferentes especies se concentraron en el área de América, pero existen dos teorías sobre su llegada a los demás continentes: la primera es que el mismo hombre lo fue introduciendo y la segunda es que llegaron allí en el estómago de aves migratorias que comían el fruto y, al morir, dejaban las semillas en el suelo.

¿Qué crees que es lo más característico del Cactus? Pues todo el mundo relaciona el Cactus con la típica planta de callo grueso y con espinas, y no todos son así. A continuación describiremos algunos de ellos, usados como decoración que poseen diferentes características físicas:

  • Piedras vivas: Estas plantas tienen una forma cónica con una ranura en medio, su estructura es rocosa y la flor que crece en la ranura puede ser de diferentes colores en cada piedra. No requieren de luz solar, aunque sí de agua para mantenerse viva
  • Echinocactus grusonii: también conocido como Cactus erizo, son la típica planta con tallo en forma de barril, con un color verde oscuro y espinas de color amarillo o rojo. Florecen mayormente en verano y requieren mucha luz solar para su mantenimiento y agua.
  • Mammillaria Fraileana: es un Cactus con el tallo en forma de cilindro y hojas, que puede crecer hasta 15 centímetros con espinas. Requiere de mucha luz solar y debe regarse una vez a la semana en verano y una vez al mes en invierno.
  • Opuntia Ficus Indica: es un Cactus tipo arbusto que llega a crecer hasta 4 metros de altura. Carece de hojas y posee muchas espinas. Requiere de luz solar directa para poder sobrevivir.
  • Cactus de Navidad: es un tipo de Cactus que no tiene espinas, su tallo es colgante y sus flores suelen ser muy coloridas. Es una planta que no requiere de luz, más bien deben estar en temperaturas frescas para poder crecer, por lo que son buenas para el invierno.

Para poder cultivar un Cactus, es preciso saber que la tierra debe tener un ph cercano a 6 y ser rico en nutrientes. En cuanto a la temperatura, no debe ser inferior a 7°C, por lo que en invierno debe mantenerse en invernadero o dentro de casa. En cuando a la luz, vimos en los tipos de Cactus anteriores que esto puede variar, aunque la mayoría son resistentes a los rayos del sol.  El riego va a depender de la época del año, en primavera puede ser cada 12 días, en verano cada 8 días y en otoño e invierno cada 20 o 40 días.

Por último y aunque no lo creas, algunas especies de Cactus son comestibles y tienen propiedades medicinales, tal es el caso del Nopal o Tuna, el Hoodia Gordoni, el Cactus Glandiflorus y el peyote. Algunas de sus virtudes son:

  • Capacidad antibiótica y de eliminación de bacterias.
  • Pueden ser ricos en vitamina C, cálcio, fósforo y hierro.
  • Retrasan el envejecimiento celular.
  • Regulan el nivel de azúcar en la sangre.
  • Puede ser un laxante.
  • Son propicios para adelgazar.

Además de estos, tienen otros usos, como antioxidantes para el cabello y la piel, por lo que son muy usados en el mercado de la cosmética. Lo importante es conocer bien la especie de cactus que tenemos y sacarle el mejor provecho posible, respetando sus necesidades y siguiendo los consejos de los expertos.

Cactus
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