¿A quién no le gusta tener un gran jardín lleno de plantas de diferentes colores?
Sin duda, a la mayoría de las personas les encanta este aspecto y, para eso, se utilizan las llamadas plantas de exteriores. Estas son usadas por las personas debido a sus características físicas y a sus propiedades, ya que algunas de ellas son solo ornamentales y otras pueden servir para cocinar o como complemento medicinal.
Sin embargo, no solamente se encuentran en jardines. Es común ver plantas de exteriores en espacios comunes de la sociedad, como parques y plazas. Los jardines botánicos son los mayores bancos de plantas que poseen las ciudades y es allí en donde mejor nos podemos educar sobre las diferentes especies que podemos tener en nuestras casas.
Cuando hablamos de exteriores, no nos referimos únicamente a aquellas plantas con flores extensas, o a arbustos y árboles, sino también a todas las gramíneas que son las más normales en cualquier espacio abierto y que, al igual que las otras, requieren de cuidado para mantenerlas verdosas y atractivas.
Estas plantas de exteriores se caracterizan por tener un cultivo fácil, al igual que sus cuidados. La mayoría de ellas son resistentes a los cambios de clima y toman de los fenómenos climáticos naturales los cuidados necesarios, tales como nutrientes del suelo o cantidad de agua.
Entre las plantas de exteriores más reconocidas podemos encontrar:
Las gramíneas: comprenden todas las plantas herbáceas, aproximadamente más de 1.200 especies conocidas. La mayoría de ellas pueden ser cultivadas en jardines y otras requieren grandes espacios para poder crecer y reproducirse en masa.
El laurel: es un árbol que puede alcanzar los 9 metros de altura, sus hojas son gruesas y las flores amarillentas. Este follaje tiene un aroma que es usado para ambientar lugares y, sus hojas, son propicias para la cocina.
Mano de Buda: es un arbusto que posee sus hojas largas y de color verde grisáceo. Su fruto es la Cidra, y se encuentra dividido en partes parecidas a dedos.
Hortensias: es una planta de corto tamaño que, al final del tallo, florece en grandes cantidades y con variados colores, siendo una de las preferidas para los jardines.
Buganvilla: es una planta trepadora que es apropiada para adornar terrazas, muros y fachadas. El color de sus flores puede ser blanco, rosado, morado o amarillo.
Otras plantas de exterior pueden ser los rosales, las dahlias, los geranios, el cactus, la abelia, entre muchas otras. Para poder plantarlas, es preciso hacer una profunda investigación y saber si la planta puede estar expuesta a la luz solar o requiere sombra. Luego, decidir si se van a plantar en el suelo directamente o en macetas y buscar el tipo de tierra adecuada. En cuanto al riego, si se vive en una zona muy cálida, probablemente requiera que se riegue constantemente, a diferencia si se vive en una zona fría y con constante lluvia.
La poda es muy importante para las plantas de exterior, ya que están expuestas a factores que pueden degradar algunas hojas o ramas y es preciso retirarlas. De igual forma, si se encuentran en macetas, es propicio trasplantarlas al menos una vez al año para que puedan recibir nuevos nutrientes.
Ya sabes entonces, es muy amplio el abanico de opciones que tienes para hacer de tu jardín un lugar hermoso o simplemente para ayudar en la estética de espacios públicos.